SUS ENSEÑANZAS ESTARÁN SIEMPRE EN NUESTROS CORAZONES

Hace cinco años partió de este mundo el Sr. Geo Bianchini, quien estuvo al frente de la Fundación Betania tras la muerte de su esposa, la sierva de Dios María Esperanza. Desde entonces, no dejó de recordar a todos sus hijos espirituales, ni un solo día, la verdadera misión de cada uno: “Salvar almas para Dios”. Repetía una y otra vez; “Estamos llamados a despertar a tantos seres que no saben por qué viven. Estamos llamados a llevar el amor de Jesús, el amor del Padre, a renovarlos, para que sean y seamos todos hombres nuevos. Eso es lo que necesita el mundo; un mundo nuevo. Esa es nuestra gran responsabilidad. No olvidemos la misión tan grande que tenemos, la misión que Dios nos ha dado, sepamos corresponder a esa misión.”